Abre José Manuel García Cheda esta nueva obra evocando el Salmo Responsorial 97: «¡Cantad al Señor de la Gloria un cántico nuevo: cante el cielo, la tierra y cante el mar…!» Queda anunciada la exaltación que pretende esta música arrebatada y militante. José Manuel resume en dos líneas la línea técnica de esta composición: “Una sola melodía se combina consigo misma en imitación absoluta y, en su progresión ascendente, pasa por todas las tonalidades hasta reencontrase con el principio.
La titula “¡DOXA! – 72, Canon 30 (4 voces y orquesta). Duración. 2’ 48”. Una música que haría temblar al mismísimo rosetón de la catedral de Mondoñedo.
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