Wenceslao Vila Poupariña

Bretoña (Lugo),  1947.

Sobre los doce años, al inicio del curso 1959-1960, ingresó  con Manuel Coroas Carballeira y José Ramón López García (autor, años más tarde, de  muchas de las portadas de Trapecio)) al Seminario de Lorenzana.

Recuerdo de 1959.-“Tengo ante mí un “plegable” de aquellos tiempos, que dice: “Real Seminario Conciliar de Sta. Catalina de Mondoñedo. Alumnos matriculados en el Curso Académico de 1959-1960. Latín y Humanidades. Curso 1º, Y  ahí aparecemos los 62 que componíamos una lista que iba de Francisco Alonso Casa a  a  Manuel Villares Vázquez. Repasando los nombres no consigo ponerles cara a todos, pero un sinfín de recuerdos agradables se amontonan en mi cabeza y gracias a esta Web y sus fotos, ya os he visto a muchos”, recuerda hoy Wenceslao..

 

Dino Pacio.-“A continuación de la lista de aparece: ”Alumnos que cursan en otros Centros. Roma, Universidad Gregoriana: Pacio Lindín, Digno, Bretoña (Lugo»”, nuestro profesor a quien todos apreciamos y tenemos en mucha estima, tal y como comprobamos en las consideraciones que aparecen en estas páginas. Si la salud le ha hecho un mal regate, que se mejore, que aquí en España un numeroso grupo de exalumnos estamos deseando su recuperación”.

Maestro nacional.-Salió del Seminario cursando Filosofía. En el Instituto de Lugo hizo reválida de Sexto y Preuniversitario.  pero la buena publicidad de una nueva Diplomatura de Magisterio, el Plan 1967,   hizo que se decidiera por dicha formación en La Escuela Normal de Lugo;  el resto de la carrera la finalizó  en Orense donde ejercía a la vez de Educador del Colegio Menor.

Sáhara.- Por diversas circunstancias fue nombrado director del Colegio Menor de Viillacisneros,  el UAD.D´HAJAB, que en aquellos tiempos era la Región Sur de la provincia del Sáhara. Allí permaneció  durante La Marcha Verde de Marruecos sobre el territorio saharaui. Se habla de “descolonización”, y el 20 de Noviembre de 1975, día de la muerte Franco,  llegó a Madrid.

Oficial de la Orden de África.-Sin que él pudiera siquiera sospecharlo, el 23 de junio de 1976 le  comunica Presidencia del Gobierno la concesión del título de Oficial de la Orden de África, en reconocimiento a su “brillante labor educativa”. Un distinción que siempre le satisfizo  porque –dicho esto entre amigos-  la había currado mucho,  “pues mis alumnos iban desde el Ciclo Superior de Colegio Público hasta Preuniversitario del Instituto,  edades difíciles, todos saharauis y la mayoría del Polisario”. Wenceslao era consciente del aprecio de esos. El día que salía para la Península allí estaban todos para despedirle. “Uno de los de  Preu me rompió el corazón, cayéndosele las lágrimas me dijo: “Don Wenceslao, ¿y ahora, qué? Según me cuentan,  a la entrada de las tropas marroquíes hubo muchas barbaridades y muchas muertes”.

Profesores en Almería.-En este territorio conoció  a su mujer, una almeriense destinada también como   maestra en el Colegio Público.  “Nos casamos, y a mi hija y a ella, Charo, las evacuaron casi al iniciarse el curso. Ahora ya se sabe por qué vivo  en Almería”,  De regreso a esta ciudad, el Gobierno les remitió un escrito para que eligieran centro donde trabajar el resto del curso. Mostramos ese escrito  en la Delegación de Educación pero no sirvió de nada: “un jefe de personal se nos quedó mirando y nos dijo;  Venís de los moros a los gitanos”, y nos destinaron al colegio público de Los Almendros, donde , por cierto, estuvimos muy bien.

De ahí, ya con plaza definitiva, pasaron al colegio público  San Agustín, en El Ejido. En este centro se imparten enseñanzas de Infantil, Primaria y el primer ciclo de Secundaria y donde el profesor Vila Poupariña inició  sus experiencias con los comics. Aquella es zona de invernaderos y también de muchos alumnos hijos de inmigrantes del norte de África. “¿Nos persiguen o los queremos?

Premio de investigación educativa.-En 1989, Wenceslao se  presenta al concurso de investigación educativa Joaquín Guichot, de la Junta de Andalucía,  abierto a  todos los niveles educativos excepto la Universidad. Consiguió el primer premio entre 120 trabajos presentados de toda Andalucía. El  tratado iba sobre los comics. Para hacerlo,  el profesor  va introduciendo en su proyecto las técnicas más elementales de la expresión escrita, oral y, sobre todo, desarrollando la creatividad de los alumnos, ya  desde el primer momento en que tienen que inventar el nombre de su personaje. La obra se titulaba  “Comics = Tebeos ¿Cómo se hacen?

Editada en España e Iberoamérica. La Junta de Andalucía hizo una primera publicación de 5.000 ejemplares con destino a  todos los centro educativos y, posteriormente,  una segunda edición  de lujo para la EXPO 92. Dos años más tarde, la editorial Octaedro de Barcelona se interesó por su publicación y el trabajo salió a la luz con el título  “Así  hago un cómic, Así aprendo a escribir”, Va por la 3ª edición, pero ya  desde la 2ª se publica en Sudamérica con el nombre de editorial Octaedro-Aguazul con distribución   en Chile, Colombia, Panamá, Uruguay y Venezuela. En esta edición  propone el autor  nuevos formatos de comics,  tales como “El cómic en verso”, para practicar el arte de la versificación,  y “El cómic en rayajotes” para ejercitar el dibujo.

Metodología del cómic.-Para dar a conocer esta metodología ha impartido sobre 60 cursos en los Centros de Profesores de Almería a compañeros de Primaria, de EGB y del antiguo Bachillerato. He aquí algunas opiniones sobre la obra de Wenceslao Vila Poupariña:

  • “Es un libro para hacer libros en el que chicos y grandes, con unas sencillas técnicas, consiguen dar forma de tebeo a su imaginación”.
  • Miguel Ángel Blanco, antiguo director del periódico Ideal, de Almería: “Muchos hemos quedado en el intento de hacer un cómic; con el libro de Wenceslao, llegados al “argumento en chino”, podemos confirmar con total garantía que conseguiremos nuestra primera obra gráfica y literaria, nuestro queridísimo cómic.

El libro y su autor  aparecen en la enciclopedia  Diccionario de la Historieta Española 1873- 1996, de Jesús Cuadrado con  prólogo Román  Gubern, quien   cataloga a Wenceslao Vila  como “teórico impulsor de la creación de comics en el mundo de la Enseñanza, mostrando un procedimiento muy simple y con modelos para que los profesores puedan practicarlo en sus aulas”. Figuran también autor y obra  en el “Atlas de la Cultura Popular de la Historieta  y su uso, años 1873 a 2000 “, de Ediciones Sinsentido, de la Fundación Sánchez Ruipérez.

«Termino. Aparte de saludaros a todos, s diría con la boca pequeña: ¿Os animáis?”