¡Silencio!: Canta Dani Artiaga

Dani, tras el concierto de la Coral del Real Casino de Madrid

Nos faltaba una voz cantante en el frondoso club de “jubilados con oficio” y ya lo tenemos. Se llama Dani (en el siglo, Daniel González Artiaga), mindoniense del 45, villalbés de adopción, ciudadano del mundo afincado en Madrid y dueño de una voz de bajo que prestigia un coro. Lástima que no llegara a tiempo de pasar por las manos de don Uxío y su Schola Cantorum en Mondoñedo (sólo pasó por Lorenzana, pero con gran arraigo emocional), porque podría competir con el mismísimo Ferreiro.

Dani inaugura la sección coral de ese club de oficios sobrevenidos de nuestros viejos camaradas. Teníamos el de los filósofos que siguen publicando libros (Ginzo, sin ir más lejos), historiadores (Antón Meilán o Germán Castro), un jardinero-carpintero (David Corral), un actor y promotor teatral (Xulio Leal), un ceramista (Benigno Rey Sarmiento) y hasta un fruticultor de tronío, Antonio Grandal, príncipe de los limoneros. Dani viene a dar el Do de pecho, reclamando la presencia del amigo José Luis Caruncho, organista de feliz recuerdo durante sus años en el Mayor, pero imperdonablemente inactivo en Antas de Ulla.

Alumno del Pallarego.-A Dani le llegó la música por la vena de los Artiaga. En casa de su abuela materna hubo siempre un piano que aprovecharon con lucimiento una tía suya y la propia  hermana de Dani. No tendría más de siete años cuando Dani cayó en manos del maestro Pallarego (legendaria figura de fígaro-músico de Mondoñedo y recurrente personaje en las letras de Cunqueiro), para recibir clases de guitarra durante un verano. No llegó a ser un Andrés Segovia, pero la guitarra sigue presente en casa de nuestro cantor. Como un icono,

Con unas livianas lecciones de solfeo en Lorenzana –tan útiles a la postre- participó en el coro de la Universidad Laboral de Córdoba, todavía adolescente y continuó cultivando la voz  fuera de programa, allí donde tres gallegos almuerzan juntos. Canto familiar, canto de amigos… hasta que llegó Madrid y, para David,  la consagración de la primavera: vuelta a canto con dedicación regular.

Sala de conciertos del Casino madrileño

Fundador de la Coral del Casino de Madrid.-Atrás quedaba una exitosa carrera de empresario del transporte. Aparte de breve participación en coros menores, Dani aparece en el grupo fundador de la  Coral del Real Casino de Madrid (el de Alcalá, 15) en 2014.  Como veterano socio de la institución, conoció la iniciativa de la mano del  entonces gerente y se adhirió con entusiasmo al proyecto. Ahora va por su tercer director, Juan Vida Romeu –pianista, cantante, compositor- con  un amplio repertorio de canciones en su carpeta y la ilusión intacta. “Un director muy exigente pero que nos ha encandilado a todos con su manera de hacernos entender la música vocal y con un  atractivo repertorio”, reconoce Danid.

Coral del Real Casino de Madrid

Concierto del 21 de diciembre.-.Cuando se acerca el tiempo de conciertos, los ensayos son de  tres horas dos veces por semana. Fruto de esa disciplina es el éxito del concierto de Navidad ofrecido por la Coral, en la propia sala del Casino, el pasado 21 de diciembre. Programa variado y   exigente: obras de Zoltan Kodàly (Hungría, s. XIX-XX), Cancionero de Upsala (XVI). Joseph Ignaz Shnabel (Polonia, XVIII-XIX), J. S. Bach (Alemania XVII-XVIII), Julio Caccini (Italia, XVI-XVII). Jonathan E. Spilman (USA, XIX), Hugo Blanco (Venezuela, 1940-2015), Justin Hurwitz (USA, 1985).

Próxima cita, Semana Santa 2024. Vaya por la memoria del Pallarego: allí empezó todo.

Enhorabuena, Dani.-R. B.

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